Los renglones torcidos de Dios

Este libro se publicó por primera vez en 1979 y se volvió a editaren 2009, coincidiendo con su 30º aniversario, lo descubrí hace unos meses, al principio me sonaba a religión y catecismo, pero nada de eso, su autor Torcuato Luca de Tena, presenta a los personajes con tal verosimilitud que es imposible no apreciar su calidad. Mantiene el interés de tal manera que hace que tu opinión sobre la protagonista cambie en cada capítulo de forma radical :la entiendes, desconfias de sus actos, te enternece, te asombra,...  Una detective privada que ingresa en un manicomio para investigar el asesinato, que supuestamente cometió alguien que está internado allí. Esto la obliga a estudiar el comportamiento de los pacientes y conocer de primera mano sus enfermedades mentales; tan dramáticas, tan duras, tan reales...

 El autor nos describe esto con una capacidad narrativa, tan cercana y potente que nos permite seguir la trama y no despistarnos con una simple novela de misterio, sino que ahonda en los casos de los enfermos, resolviendo algunos de ellos, mediante el reconocimiento del origen del problema, con la fragilidad y el autoengaño de quién lo padece, como pieza desgarradora en las tinieblas de la mente enferma.

 Y quién, no se habrá sentido alguna vez tan perdido en sus propios temores, en sus actos inconclusos, en sus convicciones morales, tan sumamente asustados, que no vemos un rayo de luz que nos guie? Es facil identificarse con alguno de ellos, seguro que todos hemos estado alguna vez tan perdidos y encerrados, siempre rozando esa delgadísima línea que para nosotros sería un " mal momento" y el abismo de las alucinaciones, las manias y la paranoia en la que se pierden ellos.

 Los "desventurados errores de la naturaleza" como los llamaba Torcuato en su agradecimiento a todos los médicos, cuidadores, enfermeras a los que dedicó este libro -y aquí viene la curiosidad de esto- el autor se internó durante 18 días en un sanatorio, fingiendo una depresión para preparar su libro, de ahí, su plasmante realidad a la hora de describirnos a los personajes, por ejemplo, la protagonista que al igual que él ingresa para investigar, parece tan inteligente, tan culta, amable, tan fuerte y normal, que nos confunde durante toda la novela... pero no contaré más, puesto que os recomiendo encarecidamente que leáis el libro. Lo menos favorable es que el autor se pierde en ocasiones con un lenguaje un tanto arcaico, en la forma de estructurar las frases y de llamar a ciertos lugares de manera distinta a como hoy lo hacemos, pero todo eso es debido al paso del tiempo y la época en que el autor escribió el libro, aún así, no sé cómo hace que no dejemos de perder ni un ápice de interés sobre la obra.

 Creo recordar que se hizo una película sobre el libro y que incluso el autor ayudó a escribir el guión, pero sin lugar a dudas, yo me quedo con el libro, dicen que no hay película buena sin un gran guión, de igual modo, no sería posible crear un guión bueno sin la estructura magistral de un GRAN LIBRO.